El informe de la OMS de 2012 sobre la contaminación aérea reveló datos que relacionan la contaminación atmosférica como el mayor riesgo ambiental sanitario del mundo.
La influencia de la contaminación ambiental en el sistema respiratorio y cardiovascular es bien conocida y cada vez surgen más evidencias sobre sus efectos nocivos en la piel:1,2
En 2010, un estudio epidemiológico multifuncional realizado en Alemania (SALIA: Estudio de la influencia de la contaminación atmosférica en la función pulmonar, la inflamación y el envejecimiento) demostró que la exposición permanente a las partículas (PM) emitidas por el tráfico está estrechamente relacionada con el envejecimiento extrínseco de la piel, en especial, con la formación de manchas.1
Más recientemente, un estudio chino con dos cohortes reveló que la contaminación del atmosférica está vinculada con el desarrollo de arrugas profundas.1
La contaminación puede provocar o empeorar las patologías cutáneas1
La contaminación ambiental no solo influye en la piel sana, también tiene un efecto nocivo en pieles afectadas por diversas dolencias, como demuestran varios estudios epidemiológicos:
Todavía no se conocen todos los aspectos de los mecanismos de acción1
Desde un punto de vista teórico, los efectos dañinos de la contaminación en la piel pueden deberse a:
- Un efecto fuera-dentro, por ejemplo, la penetración de PM y/o de compuestos orgánicos vinculados a las PM en la piel
- O un mecanismo dentro-fuera: la exposición a PM podría provocar efectos sistémicos como consecuencia de:
- Partículas que entran en los pulmones y, posteriormente, pasan a la circulación, y que podrían afectar a la piel.
- Y/o debido a una reacción inflamatoria en los pulmones, que a su vez podría desencadenar reacciones inflamatorias sistémicas, cuyo efecto podría resultar nocivo para la piel.
Las investigaciones actuales sugieren que cada contaminante atmosférico concreto ejerce una acción específica y tóxica sobre la piel.
- Sobre la piel sana:
- El ozono es una molécula muy inestable que se dirige exclusivamente a la superficie cutánea sin ejercer un efecto directo en las células vivas. Actúa principalmente en el estrato córneo, donde se oxida rápidamente con las moléculas.1
- Por el contrario, los compuestos orgánicos presentes en la superficie de las PM pueden penetrar en la piel y afectar directamente a las células viables como los queratinocitos y los melanocitos, por ejemplo, vinculándose al receptor AhR, lo que puede dar lugar a una expresión génica que induzca envejecimiento cutáneo, pigmentación y estrés oxidativo, con la consiguiente inflamación.1
- Sobre una piel con deficiencias en la barrera: las partículas pueden penetrar y provocar estrés oxidativo e inflamación cutánea.1
Modelo actual de daños cutáneos provocados por la contaminación.Fuente:Krutmann, J. et al. «Pollution and skin: «Pollution and skin: From epidemiological and mechanistic studies to clinical implications» [Contaminación y piel: de los estudios del mecanismo y epidemiológicos a las implicaciones clínicas]. Journal of Dermatological Science(2014)1 (AhR, receptor de hidrocarburos de arilo; COX-2, ciclooxigenasa-2; ICAM-1, molécula 1 de adhesión celular; IL1a, interleucina 1a; IL6, interleucina 6; MITF, factor de transcripción asociado con microftalmia; MMP, metaloproteinasas de matriz extracelular; O3, ozono; PAH, hidrocarburos poliaromáticos; POMC, proopiomelanocortina; PM, materia particulada; ROS, especies de oxígeno reactivo; UV, ultravioleta, COV; compuestos orgánicos volátiles.)
Ampliación
Para saber más sobre la contaminación1,2
La contaminación consiste en la introducción de agentes químicos, físicos o biológicos nocivos en el entorno interior o exterior.
La contaminación exterior se debe a una combinación de fuentes contaminantes fijas, como las fábricas, y fuentes móviles, como el tráfico aéreo y terrestre.
Esta combinación produce contaminantes primarios y secundarios:
- Los contaminantes primarios se pueden dividir en dos grupos: la ateria particulada o partículas en suspensión (PM), que suelen clasificarse en ultrafinas, finas o gruesas (UFP, PM2,5 y PM10).Las partículas más pequeñas se producen por combustión y las más grandes se generan a partir de procesos mecánicos que crean y suspenden partículas en el aire. Gases (CO2, CO, NO2, NO, NOx, SO2) o compuestos orgánicos volátiles.
- Los contaminantes secundarios, como el ozono y los nitratos de peroxiacilo, se forman debido a reacciones fotoquímicas de los contaminantes primarios con el calor y la radiación UV. Estos contaminantes permanecen en la capa inferior de la atmósfera (troposfera) y se establecen sobre áreas urbanas o rurales, dando lugar al fenómeno conocido como smog.
Nota: clasificación de los contaminantes atmosféricos de la Agencia de Protección Medioambiental (EE. UU): – plomo (plantas metalúrgicas y de procesamiento industrial); – materia particulada (hollín, emisiones, industria); – óxido de nitrógeno y monóxido de carbono (emisiones de vehículos); – óxido de azufre (plantas industriales); – ozono troposférico (resultado de la reacción fotoquímica entre el O2 y contaminantes como los hidrocarburos y los óxidos nitrosos facilitada por la luz del sol).